Eutanasia

He visto el deceso graduante y paulatino
presagios anunciaron el futuro. Inocuo y
mal humorado, sin expresión facial llegaba
a un estado de nirvana...

Se llora a secas, más no se derraman lágrimas
gritos musitados, que no son escuchados, pocas fuerzas
quedan. Me desplomo, abatido caigo al suelo no soy capaz de
conciliar el sueño, me desvelo;

Dolor, miedo y calmantes han ceñido mi cuerpo ¿Qué amigo, se
inmolará por mi? Será el ultimo favor que realizáis, en honor a la
amistad...

Las horas no corren y la tarde se aleja, trayendo la ventisca
y el manto de la noche.
Acercate sin miedos y ve el brillo en mi mirar, terminen descendiendo en Su(vida) con el germen que acongoja.

En una plegaria oriunda, moribunda
¡ Pido asistencia ! que me tiendas las manos,
en el lúgubre adiós que clamaran las trompetas
drena mi sangre y sacia mis venas.
¡Por primera y ultima vez Asisteme! llevame a dormir y calmemos el sufrir...

Anticipando el Perdon

Me anticiparé a vuestro ser, interpretando
tu silencio, si yo soy el padre y tu serás el
hijo...
Yo, el que robó tu despertar tu silencio, con
la violencia y la fuerza del ladrón...
¡ Yo robé de mi cuerpo y del de ella, un momento
de placer !
Adoleciendo de conciencia, me levante y te desperté
a la vida atrayéndote a mi , volviendo otra vez más tu
aquí. A ser ¡ el reencarnado, serás el hijo del hombre,desdichado
un poco olvidado !...
Yo me levanto en símbolos y revelo mi sentir, existencia divina,
profana, sagrada, que pisa la tierra deja las huellas que tu serás
el Obligado;
Buscad al Dios, como todo hombre que necesita un guia y un Perdón.
¡Yo busco a Dios para mostrar mi crimen y pecado, y ser castigado!...

Robé de vuestra madre el placer de aquellas noches, robé de vuestros cuerpos
el sexo armonioso. Desperté mi sexo sentido, Impetuoso que arrasa con el libido
etéreo. ¿ Te habré embrujado con la maldición del odiado?
En los años venideros...
Como vasallo llegaras a rendir honores, que no serán para mi caballero...
Noches impenetrables, sortilegios y embrujos entre el alcohol y la vehemencia,
hacen un símil, una sugerencia. No teman que nada podrá contra ti si eres tu el oscuro...

Perdonandme corazón, perdonadme ojos del vidente: oír a los pastores predicar las
profecías.
¿ No fue un acto de amor? Engrandecí mi ego. con el candor de vuestra madre, con el fruto que engendré en su vientre bendito, engendro que ella carga hasta el final de sus días...
El misterio que envuelve revolucionando mi cabeza; al final cae y dulcemente cede ante nosotros,
arrastrándonos al llanto a oscuras.¡ Si hasta las bestias han de quebrarse y sentir pena por la condena que he de cargar !.
Imperdonable tal vez ante vuestros ojos es mi desdicha, por el huir anticipado,
con el miedo de un soldado antes de la guerra.
Al final la sangre llamará y buscaré sus brazos, pero Tu me negarás 3 veces ante las profecías
negarás mi existencia y si nos vemos algún día evitaras la mirada mía.
Yo marcaré el testamento quedando al descubierto:
El ángel traído serás tu el ¡ Hijo Nacido !...

Pdta: Este perdón anticipado lo hice pensando en aquellos padres que engendran hijos, y huyen de sus responsabilidades y mas tarde se han de arrepentir.Espero les guste si leen este escrito también los invito a leer "El delito de Nacer" que escribí en septiembre del 2008.
gracias a todos mis lectores.

Letanías

Aquellos labios gruesos dejaban pasar el
runruneo medio apagado de la interminable
letanía de sus desdichas, las palabras le sonaron
como viejas letanías concebidas.
Inmolaría su cuerpo, inmolaría su amor, para encontrar
entre el llanto y borrarse el dolor...

El recuerdo se vuelve un espejismo yace en su empolvada
cabeza sin distinguir la nebulosa y el frió respiro de su pecho
se agita recordando esos tiempos idos.

Escuchad esos cánticos proféticos, escuchad los suspiros mortales
letanías e imploraciones celestiales, entre noches de inviernos eternos
¡Oh! ¿ qué hechizo lanzaste sobre mi?
como olvidar como exorcizar presa del recuerdo, haré un destazamiento retiraré las reces muertas...
Borraré con mi sangre y mi semen, ofréceme:
el profundo designio de tu vida y tu placer; reclamo. Sí del tiempo recorrido
estaré yo en tu segunda venida, nazco nuevamente y olvida tus letanías
¡ Más sólo sombra habrá en vuestros brazos !, haz corrompido el recuerdo entre el sollozo y el salar de tus lágrimas en cada ocaso...
Haremos un brindis con la copa trizada ¡Oh melancolía!
aleja de su ser la letanía
de cada día.
Descubre en mi al gemelo, borra de ti el celo, alejad tus desdichas acerca te al cielo
implorando a viva voz con tu porfía letanías de un nuevo amor...

Mi Plegaria

Fantasmas aparecen en
el oscuro de los días,
dichoso uno se siente al
extender esta plegaria.

¡ Oh, ruego a vos me alejes
de mi sentir! brindes junto a
mi con el poco hálito que me
queda, entre el tinto de la sangre;
El pálido rostro exclama...

¡ Te invoco a ti Señor ! vacía la pena
de la copa, la sangre de mis venas, sacia
de mi ser la sed de búsqueda y el hambre
del saber...
Si las víboras me roerán, las larvas mi carne
pudrirán. El sol en el ocaso iluminará mi muerte.
Muerte estremecida por centinelas, música mortuoria,
cantos gregorianos que penetran en el vacío, palabras
de aliento escritas de los hombres llenas de sufrir, llevan
por la caminata de la vida al silencioso ir del tiempo y de la
muerte...

¡ Oh, ruega por nosotros pecadores originales!
¡ Oh, Señor mio, ruega por mi y para mi por mis pecados
Banales !
¿Porqué mi ser ha callado tantos sentimientos guardados ?
en su intelecto se ocultan los vacíos oscuros de la razón,
manipulaciones de el corazón por temor a ser oído y no ser
comprendido...

¡Oh, Señores ahora ruego por ustedes que comprendan lo que escribo.
Sí ello es mi Arte y me mantiene vivo !...

Agonia Sombría

Imagen oscura que proyecta mi cuerpo
Opaco, interceptada por los rayos
De luz a los pasos del alba

Mostraban el rostro sombrío, la boca
Cerrada y la cabeza agachada...

El remordimiento causaba un suplicio
Venidero;
Marcas de estigmas de clavos en
Mis manos y mis dedos;
Flagelado por la ira abrí
La puerta de mis miedos...

Harapos me demacran;
Asco ante vuestros ojos
Y mirada,

Sólo queda en mí
Una vida lapidaria y
Perentoria;

Dos palabras, dos recuerdos
De lo que no viví en la
Memoria

La llegada de la muerte
Era más que una herida
Y vos venís aquí a hacer
Una critica temeraria...

Miráis la paja en el
Ojo ajeno,
Me hacéis beber de
Vuestro veneno;

Queréis lapidarme
Te sientas a los píes
De mi lecho a esperarme

Agonía de mi ser,
El cuerpo sombrío
Desvanecen en su
Lecho al atardecer...