martes, 6 de julio de 2010

Adiós

El vendaval había comenzado un par de horas
atrás, el viento azotaba la ventana  y tu no venias.
el reloj agota mi conciencia, en el frío de este pueblo,
mientras a ratos la tierra se estremece, ¡ no deja de temblar!.


Se me agota la dosis de cigarrillos y café que tengo en el velador.
No habrán segundas partes una vez me dije...
¡Y ahora tu llegas a buscarme!, para estar esta noche junto
al calor de mi cuerpo. ¿Qué puedo pensar?.
Agonizan mientras te miro horribles momentos en mi pecho
ido el deseo latiendo de euforia, mi cuerpo pide estar entre tus piernas,
sin inmaginar cada segundo previo a tu llegada.


Ahora bien  con la mirada fría de los amantes, sentados en el suelo
frente a la cama desolada, nos dijimos será la ultima vez que nuestros
cuerpos estén juntos, sin palabras nuestros  ojos lo decían...
Ahí se dejo ver el orgasmo agonizante e interminable que maldijo
mi pielde tu esencia esa noche.

Sí tu apuñalaste mis sueños sin sentido de una vez rasgando las arterias
y como un puñal  que  desangra, desbordaste de mi el placer que buscabas
beber esta noche fría y lluviosa.
Ahora bien me das la espalda, hay silencio en el ambiente; No me arrepiento
de tenerte de esta forma tan limítrofe, mientras tu te vistes para decir el adiós
yo mi rostro sin expresión y con desazón miro en el espejo...

2 comentarios:

RR dijo...

Hola mi AMIGO.....que bueno verte de nuevo....tu entrada es heladora, mucho más que cuando has hablado de la muerte.....ese ADIOS es frío en la sangre , es frio en el alma....yo te dejo un cálido hasta muy prontito....inmortal...y un beso muy muy cálido en la frente con abrazo cariñoso si???

Ganima dijo...

ella volverá!!!

te adoro

gani